Esta semana tenemos una colaboración muy especial en el blog. Hoy os escribe Ana, directora del Centro Rehabilitación Ocupacional y Ecuestre. Yo tuve la suerte de vivir todo lo que Ana cuenta a continuación y de comprobar todos los beneficios que tiene la terapia ecuestre de forma experiencial. Os animo a que lo viváis pero, de momento, podéis leer una introducción sobre la forma en la que Ana trabaja.
“Las Terapias Ecuestres se están utilizando para tratar a personas con cualquier tipo de discapacidad, ya sea física, psíquica, sensorial… Al iniciar la rehabilitación, como ocurre en sala, el paciente debe ser evaluado por un equipo multidisciplinar, que será quien planifique la intervención (diseñando las sesiones según los objetivos planteados y realizándolas), formado por profesionales de la salud o educación y ecuestre, ya que al trabajar con animales hay que garantizar su bienestar y la seguridad.
Una ventaja con la que cuenta este tipo de intervención es la motivación de los usuarios al acudir a terapia, ya que al realizarse en un ambiente normalizado al aire libre, con actividades divertidas, no lo consideran ir a rehabilitación, sino ocio.
Desde que llega el paciente hasta que finaliza la sesión, se producen multitud de situaciones en las que se trabajan los objetivos y se van viendo los beneficios que le aporta.
Lo primero al llegar al centro ecuestre es el saludo al equipo, incluyendo al animal; ese primer contacto es el que inicia la relación, por lo que es importante que sea positivo para la persona que se acerca por primera vez a un animal de ese tamaño. Cuando el équido se acerca cuidadosamente, mira, lo acaricia con su suave hocico… se crea un vínculo que es determinante, la primera impresión es la que se recuerda.

Si es posible, se pide al usuario que lleve al animal hasta la rampa de acceso al caballo. La persona se siente capaz de “pasear” y llevar por donde quiere a un animal de esas características, con la positividad que conlleva la responsabilidad y el logro.

Multitud de estudios científicos demuestran sus beneficios, siempre que se realice con personal formado para ello y caballos adecuados para la actividad.
Para más información o consultas, podéis visitar la página web www.rehabilitacionocupacionalyecuestre.es Estamos en San Vicente del Raspeig (Alicante).”
Ana B. Pliego Salort
Graduada en Terapia Ocupacional y E.U. en Equitación Terapéutica.
Directora de Rehabilitación Ocupacional y Ecuestre.